Descripción
La Lilith astrológica cuando se aborda con valentía de la propia oscuridad, corresponde a la mística figura de la “bruja”. Para sí misma es una surcadora de los “entremundos”, y en lo social una exorcista (expulsa las sombras fuera). Por un lado, sabe cambiar su propia realidad (la “mala suerte”) a través de la palabra. Esto es, sabe sobre la magia de decirse cosas diferentes. Y por otro, “sacude los muebles y hace tintinear las luces” de alrededor, con su sola presencia, que es de por sí, un provocativo mensaje.
